Viernes 18 de septiembre – El genio femenino aporta a la sociedad.
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Jesús, el Evangelio me habla de algunas mujeres que se dejaron tocar por tu gracia y por tu amor redentor y por eso se transformaron en auténticas apóstoles y en tus seguidoras valientes. Quiero, como ellas, permanecer siempre fiel a tu gracia, aun cuando se presente la sombra de la Cruz.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Lucas 8, 1-3
En aquel tiempo, Jesús comenzó a recorrer ciudades y poblados predicando la buena nueva del Reino de Dios. Lo acompañaban los Doce y algunas mujeres que habían sido libradas de espíritus malignos y curadas de varias enfermedades. Entre ellas iban María, llamada la Magdalena, de la que habían salido siete demonios; Juana, mujer de Cusa, el administrador de Herodes; Susana y otras muchas, que los ayudaban con sus propios bienes.
Palabra del Señor.
Reflexiona lo que Dios te dice en el Evangelio (te sugerimos leer esto que dijo el Papa).}
«Es indudable que debemos hacer mucho más a favor de la mujer, si queremos dar más fuerza a la reciprocidad entre hombres y mujeres. Es necesario de hecho, que la mujer no solamente sea más escuchada, sino que su voz tenga un peso real, un prestigio reconocido en la sociedad y en la iglesia.
El modo mismo con el cual Jesús ha considerado a las mujeres -el evangelio lo indica así- era un contexto menos favorable del nuestro, porque en esos tiempos la mujer era puesta en segundo lugar. Pero Jesús la considera de una manera que da una luz potente que ilumina un camino que lleva lejos, del cual hemos recorrido solamente un tramo. Aún no hemos entendido en profundidad cuales son las cosas que nos puede dar el genio femenino de la mujer en la sociedad. Tal vez haya que ver las cosas con otros ojos para que se complemente el pensamiento de los hombres. Es un camino que es necesario recorrer con más creatividad y más audacia.» (Audiencia de S.S. Francisco, 15 de abril de 2015).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal, ¿qué? El que más amor implique… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Hoy, viernes, memorial de la muerte de nuestro Señor, ofreceré un pequeño sacrificio por las mujeres que son víctimas de la violencia o la explotación.
«La contribución del “genio femenino”, como decía el Papa Juan Pablo II, al conocimiento de la Escritura, como también a toda la vida de la Iglesia, es hoy más amplia que en el pasado, y abarca también el campo de los estudios bíblicos»
(Benedicto XVI, Exhortación Apostólica-85, 30 de septiembre de 2010).