«La encarnación del Verbo en una familia humana, en Nazaret, conmueve con su novedad la historia del mundo. Necesitamos sumergirnos en el misterio del nacimiento de Jesús, en el sí de María al anuncio del ángel, cuando germinó la Palabra en su seno; también en el sí de José, que dio el nombre a Jesús y se hizo cargo de María; en la fiesta de los pastores junto al pesebre, en la adoración de los Magos […] Este es el misterio de la Navidad y el secreto de Nazaret, lleno de perfume a familia […] del cual beben también las familias cristianas para renovar su esperanza y su alegría».
Papa Francisco, Amoris Laetitia, 65