El pasado 6 de marzo, el Noviciado de Monterrey inició el año jubilar con ocasión del 25 aniversario de su fundación. La misa fue presidida por el P. Peter Coates, LC, uno de los impulsores de la fundación del Noviciado. Concelebraron los sacerdotes del Centro. Durante la homilía habló de cómo lo único importante en nuestra vida es aprender a amar y que ese es el único sentido de un noviciado.
Después de la celebración eucarística y durante la cena, el P. Peter compartió sus experiencias sobre la fundación recordando el esfuerzo de tantos seglares y legionarios en especial al P. Eugenio Blanco, LC, quien falleciera en septiembre de 2016. En sus palabras exhortó a la comunidad a seguir buscando la santidad de vida. Recordó que más que las propias cualidades, lo que verdaderamente importa es la santidad de vida, pues la obra es de Dios y Él sabe hacer maravillas.
Ésta es la primera de las diversas actividades que se tendrán en el centro para celebrar el año jubilar. Buscando, además, agradecer a tantos legionarios que han pasado por el Noviciado, a lo largo de los veinticinco años, y que hoy se encuentran ya trabajando pastoralmente en diversas partes del mundo; otros, continuando sus estudios en los demás centros de la Legión.