Del 7 al 10 de febrero, los rectores de los centros vocacionales (CV) de la Legión de Cristo se reunieron en el centro vocacional de la Ciudad de México para una jornada de capacitación y seguimiento sobre la implementación de «Habla, Señor, que tu siervo escucha», el documento que define la identidad de los centros vocacionales y sus etapas de formación.
Recibieron también una charla impartida por uno de los psicólogos de Reparare, sobre el diálogo intergeneracional. Los rectores fueron exponiendo sus planes de formación y los reglamentos de cada centro vocacional.
“Hemos podido constatar como el documento ‘Habla, Señor, que tu siervo escucha’ ha dado mucha unidad a los procesos formativos dentro de nuestros centros vocacionales”, comenta el P. Gerardo Flores, LC, miembro del Consejo General de la Legión de Cristo y delegado del director general para los centros vocacionales.
Participaron presencialmente en esta jornada de capacitación, además del P. Gerardo Flores, LC, el P. Thomas Murphy, LC del CV de Indiana (USA), el P. Luis Rebollo, LC del CV de Monterrey (México), el P. Jorge Reyes, LC del CV de León, Gto. (México), el P. Joel Herrera, LC, del CV de la Ciudad de México, el P. Manuel Castañeda, LC del CV de Río Negro (Colombia), y el P. Daniel Egervári, LC del CV de Bad Münstereifel. Se conectaron en línea los padres Sergio Espinoza, LC y Alejandro Fuentes, LC, rector entrante y saliente del CV de Curitiba (Brasil), el P. Carlos Blandón, LC del CV de Mérida (Venezuela) y el P. Edgar Pulido, LC del CV de Moncada (España).
Los rectores de los centros vocacionales tuvieron también un momento de trabajo con los instructores de novicios de Monterrey quienes presentaron el plan de formación del noviciado y ofrecieron retroalimentación a los padres.
También participó en el encuentro el P. Alberto Simán, LC, director territorial de México y Centroamérica, quien presentó a los padres la visión que él tiene del centro vocacional y como está buscando impulsarlo, valorando la promoción vocacional que se hace a través de los centros vocacionales.
En el último día de la jornada de capacitación, el P. John Connor, LC se conectó desde Roma para transmitir a los padres la visión que él también tiene de los centros vocacionales y su deseo de apoyarlos y promoverlos. Agradeció a los padres por su trabajo y escuchó las conclusiones a las que cada uno de los rectores fueron llegando.
Algunas experiencias de la Jornada
“La oportunidad de compartir experiencias con los rectores de otros centros de formación de diferentes países y culturas fue una experiencia muy enriquecedora. Me ha ayudado a abrir horizontes y aprender de la experiencia de lo que están haciendo otros rectores”, comenta el P. Carlos Blandón, LC, rector del centro vocacional de Mérida, Venezuela.
«Como rector vivo los retos propios de mi centro vocacional y, al ver las soluciones que otros tienen en sus respectivos centros, me hace ver también que hay otro tipo de retos, problemáticas y proyectos y puedo considerar en lo que están implementando para ir hombro con hombro trabajando en esta misión de formar a los adolescentes”, añade el P. Carlos.
Por su parte, el P. Jorge Reyes, LC comentó: “Esta jornada de capacitación fueron días de mucha reflexión, de intercambio y eso siempre es muy positivo. Destacaría algunos aspectos. El primero, creo que en este momento nos queda claro a todos la identidad del centro vocacional. Lo segundo es que hemos encontrado una unidad dentro de la diversidad y esto es muy valioso. Cada lugar, cada circunstancia, cada cultura determina muchas veces la dinámica en cada centro de formación. No podemos tener quizá las mismas prácticas, pero sí la misma esencia. Los principios basilares de la formación son los mismos en este momento y eso nos da mucha paz”.
“Como un tercer aspecto destacaría que percibimos todos una necesidad urgente de seguirnos formando en el tema de la dirección espiritual y del acompañamiento con los jóvenes para ayudarles a hacer un buen discernimiento porque ahí está la base. El joven es quien hace el discernimiento teniendo como centro a Dios y nosotros, como formadores somos solo guías, instrumentos que sirven para acompañar este proceso y necesitamos seguir formándonos en este aspecto. Aunado a la dirección espiritual y al acompañamiento, está el tema del correcto uso de la psicología. Todos somos conscientes del valor y de las herramientas que brinda la psicología. Sin embargo, también analizamos el peligro de ‘psicologizar’ la formación de los seminaristas menores. El lugar justo de la psicología es brindar esas herramientas para la persona, pero no como un determinante del discernimiento. Es un equilibrio en el que tenemos que seguir formándonos y de guiarnos de profesionales”, dice el P. Jorge.
“En relación a los jóvenes, todos estuvimos de acuerdo en que parte de este proceso y de este discernimiento no se da sin el encuentro con Dios. Uno de nuestros grandes retos es lograr que nuestros jóvenes encuentren a Dios, que nuestros jóvenes conozcan verdaderamente a Dios y puedan partir de ahí para hacer un buen proceso teniendo a Dios como centro de su discernimiento”, y concluye el P. Jorge, «también la comunicación activa, la buena comunicación que debe haber con todas las diversas instancias de la formación en las diversas etapas: rectores con los demás rectores de los centros vocacionales y también los instructores de novicios con los rectores de los centros vocacionales. Si hay buena comunicación hay buen acompañamiento con los jóvenes. Si hay buen diálogo hay mejores frutos para nuestros jóvenes”.