Del 7 al 10 de noviembre se desarrolló en Seúl la edición XVIII del Congreso de la Federación Asiática de las asociaciones médicas católicas en la Universidad Católica de Corea. Uno de los ponentes fue el P. Joseph Tham, LC, profesor de bioética del Ateneo Pontificio Regina Apostolorum y Research Scholar de la UNESCO Chair in Bioethics and Human Rights.
El P. Tham habló durante las sesiones dedicadas a las “amenazas a los nacimientos”. Durante su conferencia abordó los principios de la Iglesia Católica sobre el inicio de la vida y las cuestiones reproductivas, basados en la ley natural y una visión metafísica. Hizo notar cómo hay desafíos crecientes en el mundo moderno: desde los años 60, el declive de la fe en Occidente ha dificultado la aceptación del Magisterio, mientras que en Asia, donde predominan valores confucianos, budistas e hindúes, estas enseñanzas generan tensiones culturales. Además, el avance del secularismo y filosofías como el transhumanismo y el pansensualismo contrastan con la visión católica de la vida y la familia.
El P. Joseph mostró que en Occidente, la Iglesia ha intentado adaptar su mensaje mediante un enfoque en la dignidad y los derechos humanos, pero el concepto de una verdad objetiva y naturaleza humana común está debilitándose. Según Charles Taylor, esto refleja un cambio hacia un “yo” existencial más fluido. En Asia, explicar la ley natural es aún más complejo, requiriendo una inculturación que dialogue con las tradiciones locales.
Entre las estrategias para superar esos desafíos -según explicó P. Joseph- destacan el servicio comunitario, como el trabajo de Caritas y Madre Teresa de Calcuta, y la via pulchritudinis o camino de la belleza. La Iglesia, históricamente promotora de las artes, encuentra en la belleza una herramienta poderosa para evangelizar, especialmente en Asia, donde se valora profundamente la armonía y la estética. Ejemplos como el proyecto “Arte para Dios”, que combina la espiritualidad cristiana con el arte oriental, demuestran el potencial de unir culturas mediante la belleza para comunicar los valores de la vida, la familia y el amor.
Al tratar el tema de “Arte para Dios”, P. Joseph mostró algunas de sus caligrafías.
Fotografías: Ateneo Pontificio Regina Apostolorum
