Considerando las sugerencias ofrecidas por la Visita Apostólica, el 16 de junio de 2010, el papa Benedicto XVI decidió continuar el acompañamiento a los Legionarios de Cristo. Con el «deseo de seguir de cerca, sostener y orientar ese camino», nombró a Mons. Velasio De Paolis como delegado pontificio para gobernar en su nombre a la Congregación el tiempo necesario y coordinar una Visita Apostólica al Movimiento laical Regnum Christi.

Los modos de ejercicio de este cargo, indicados con un decreto del secretario de Estado de julio de 2010, preveían que los superiores permanecieran en el cargo ad nutum Sanctae Sedis y que debían trabajar en comunión con el delegado quien, a su vez, podía contar con la ayuda de cuatro consejeros.

Estos consejeros fueron: Mons. Brian Farrell, LC, secretario del Pontificio Consejo para la promoción de la unidad de los cristianos; el P. Gianfranco Ghirlanda, SJ, exrector de la Pontificia Universidad Gregoriana; Mons. Mario Marchesi, vicario general de la diócesis de Cremona y el P. Agostino Montan, CSI, director de la oficina para la vida consagrada de la diócesis de Roma y vicedecano de la facultad de teología de la Pontificia Universidad Lateranense. El delegado pontificio desarrolló la tarea encomendada por el papa durante cerca de tres años y medio.

En este periodo –donde además fue nombrado cardenal tras el Consistorio del 20 de noviembre de 2010–, procuró estar en contacto periódico con todos los Legionarios por medio de cartas, tanto de carácter informativo como exhortativo. Para afrontar los temas más acuciantes creó tres comisiones: la primera para la revisión de las Constituciones, la segunda para el estudio y la revisión de la economía de la Congregación y la tercera para el acercamiento a las personas que presentaban reclamos contra la Legión en relación con la conducta del P. Maciel. Al inicio de su gestión realizó algunas reformas a las Constituciones vigentes a causa de algunas inquietudes expuestas por los mismos Legionarios durante la Visita Apostólica. En concreto, suprimió la figura de los así llamados «nuncios ordinarios», por considerarla innecesaria y posible causa de confusión en el ejercicio del gobierno; dictó una nueva normativa sobre la relación entre los religiosos y la propia familia, sobre la correspondencia epistolar, sobre el correo electrónico y el uso de internet; dio instrucciones acerca de la dirección espiritual, el sacramento de la penitencia y la protección de la conciencia en el diálogo con los superiores y sobre la distinción entre foro interno y foro externo.

En general, adecuó el funcionamiento del consejo general a las normas del derecho común y del derecho propio, encaminándolo hacia un correcto ejercicio de la autoridad y de la participación. También garantizó al consejo general una mayor representación de la totalidad de la Congregación y, junto con los miembros del consejo, analizó atentamente todos los asuntos inherentes a la vida religiosa y a la administración y decidió una diversa organización práctica para algunas casas de la Congregación.

En septiembre de 2011, recibió de Mons. Ricardo Blázquez Pérez, arzobispo de Valladolid, el informe referente a la Visita Apostólica a los consagrados y a las consagradas del Regnum Christi, desarrollada en el primer semestre de ese año e inició también, como consecuencia de la Visita, un proceso de renovación del Movimiento.

El 27 de mayo de 2013 el Card. Velasio De Paolis tuvo una audiencia privada con el recién elegido papa Francisco, a quien presentó un informe. El papa le confirmó en su labor de proseguir con el trabajo que estaba realizando, hasta la celebración del Capítulo General extraordinario de la Legión. El trabajo del delegado pontificio, querido por la Santa Sede para salvaguardar el espíritu, la disciplina y la perseverancia de los miembros de la Congregación, terminó con el Capítulo General del 2014, que ha llevado a la aprobación de las nuevas Constituciones, al nombramiento de un nuevo gobierno y a una acogida general de las peticiones de renovación, con consecuencias positivas para la Congregación.